Review de The Light
Reseña del álbum homónimo de The Light
Debut sólido de una banda que se mueve entre el hard rock y el metal melódico con letras sobre control, dependencia y pérdida de identidad
Desde el sur de Alemania llega THE LIGHT, un trío formado en 2024 por músicos con experiencia previa y las ideas claras. Su álbum debut homónimo es una colección de 10 temas de hard rock con riffs contundentes, bases rítmicas marcadas y un trabajo vocal melódico que pone el foco en letras con contenido crítico. Si bien el nombre del grupo sugiere otra dirección, lo que suena aquí está más cerca de Metallica post-Black Album.
The Light es un disco directo. Cada tema está construido para funcionar de forma individual, con una producción que prioriza la claridad en la mezcla y un buen balance entre distorsión y melodía.
El sonido de la guitarra de Holger Terhorst es grueso, con afinación baja y riffs bien marcados que no abusan de la velocidad, pero sí del peso. Alex Scherz, al bajo, construye una base muy sólida con líneas sencillas pero efectivas. La batería mantiene un pulso recto, sin adornos, orientado claramente a reforzar el ritmo. La voz de Nick Antonelli se mueve entre registros medios y altos, con buena dicción, sin gritos ni guturales, lo que encaja bien con el enfoque accesible del disco.
Letras claras, sin metáforas vacías
El contenido lírico del álbum gira en torno a la crítica social, el conflicto con la dependencia emocional, la alienación diaria y la lucha por conservar la autenticidad personal frente a una sociedad que impone roles, consumo y obediencia. Esto le da al disco una coherencia temática sin caer en sermones o discursos vacíos.
Producción
El disco esta muy bien producido, con una mezcla clara y dinámica que resalta la batería y la guitarra. No hay sobreproducción: los efectos están bien medidos y se percibe una intención clara de sonar sólido y directo, sin recargar. El sonido es apto tanto para escuchar en auriculares como para funcionar en directo.
The Light es un debut honesto que no busca ser “la banda del año”, pero que sí tiene muchas papeletas para hacerse un hueco en la escena de rock alternativo europeo, especialmente en festivales donde se cruza el hard rock con lo melódico. Si mantienen esta línea y refuerzan su directo, pueden construir una base de fans fieles en Alemania, Austria y probablemente también en Europa del Este, donde este sonido sigue teniendo mucho tirón
Canción favorita: “Toxic Dependence”
